A menos de un mes del inicio del juicio por la muerte de Diego Armando Maradona, un segundo peritaje médico podría cambiar la trayectoria del caso. El informe, elaborado por el perito forense Pablo Ferrari, establece que el astro del fútbol murió a causa de un "paro cardiorrespiratorio secundario a edema agudo de pulmón producido por insuficiencia ventricular izquierda aguda", en un cuadro agónico de "corta duración".

Este peritaje, solicitado por la defensa del neurocirujano Leopoldo Luque y otros implicados, desafía el informe anterior que señalaba una agonía de hasta 12 horas. El informe de Ferrari sugiere una posible implicación de un "agente externo" en el desenlace fatal de Maradona, planteando una hipótesis de arritmia ventricular aguda de origen orgánico o la intervención de un elemento ajeno a su condición natural. Esta nueva perspectiva contradice la anterior, que atribuía la muerte del ícono del fútbol argentino a una insuficiencia cardíaca crónica.

Además, el perito destaca irregularidades en el manejo de muestras durante la autopsia, lo que plantea dudas sobre la integridad de los análisis realizados. Ferrari menciona la falta de correspondencia entre las muestras recolectadas y las entregadas al laboratorio, lo que podría afectar la precisión de los resultados.

Este nuevo giro en la causa podría tener implicaciones significativas en el juicio que está por comenzar el 4 de junio. Los acusados, incluyendo a Leopoldo Luque y la psiquiatra Agustina Cosachov, enfrentan cargos de homicidio simple por dolo eventual, basados en la premisa de que tenían conocimiento de que Maradona estaba en riesgo y no tomaron medidas para evitar su muerte.