En la madrugada de este martes, la rápida respuesta de la policía de Trelew fue crucial para salvar la vida de un bebé de un año y ocho meses que estaba convulsionando. Una cápsula de seguridad improvisada permitió trasladar al menor al hospital sin demoras. El Comisario Gabriel Araujo, jefe de la Unidad Regional de Policía de Trelew, relató los detalles del operativo en una entrevista con la prensa.

"En el barrio INTA, llegó a la subcomisaría un vehículo con una familia desesperada. La madre se bajó pidiendo auxilio porque su bebé estaba convulsionando," explicó Araujo. La intervención rápida y decidida del personal policial fue fundamental para estabilizar al niño.

El médico de guardia del hospital recibió al bebé y logró estabilizarlo. "Afortunadamente, el menor está bien. Fue una convulsión, pero la rápida respuesta del empleado policial, quien subió al vehículo y guió a la familia por las calles, y la coordinación del personal que formó la cápsula de seguridad, fueron determinantes," añadió el Comisario.

Araujo también mencionó que no había registros previos de problemas de salud del bebé. "La familia llegó pidiendo auxilio a la subcomisaría de INTA," señaló, subrayando la urgencia con la que se manejó la situación. "El niño fue colocado en una posición de resguardo y el empleado policial acompañó a la familia en el vehículo," aclaró.

Gracias a la eficiente coordinación entre la policía y el personal médico, el estado de salud del menor fue estabilizado rápidamente. "Está bien, está estable," aseguró Araujo, ofreciendo tranquilidad sobre el desenlace de este incidente.

El operativo involucró la intervención de varias patrullas de la Comisaría Tercera y la Subcomisaría INTA. "La colaboración entre distintas unidades fue clave para asegurar que el bebé llegara al hospital sin demoras," concluyó el Comisario.