"Los chicos van a hablar como puedan": padres buscan justicia en el caso del presunto abuso

En medio de la conmoción generada por el presunto abuso sexual en la Escuela 201 del barrio Los Aromos de Trelew, los padres de las víctimas expresan su necesidad de justicia y apoyo para sus hijos. La detención de la docente acusada ha traído algo de calma, pero la comunidad escolar sigue enfrentando un escenario de incertidumbre y desconfianza.

“Los chicos van a hablar como puedan, van a decir lo que puedan”, señaló el padre de una de las víctimas, consciente de que el proceso judicial será largo y difícil. La investigación se intensificó tras la denuncia inicial de un niño de siete años que describió gritos, tirones de pelo y tocamientos inapropiados por parte de la maestra. Otros niños también hablaron de fotos tomadas en el baño del aula, lo que ha agravado la situación.

Este viernes, las clases fueron suspendidas y los padres están formulando un petitorio al Ministerio de Educación para garantizar la seguridad de sus hijos al regresar a la escuela. Mientras tanto, psicólogos, psicopedagogos y psiquiatras de la Justicia están trabajando con los niños para ayudarlos a procesar y comunicar sus experiencias.

La docente, detenida el jueves, niega todas las acusaciones, afirmando que "todo es mentira" y que tiene una relación amigable con los alumnos. Su abogado, Facundo Bonavitta, atribuye las denuncias a problemas personales entre algunas madres.

Las autoridades secuestraron computadoras, pendrives y el celular de la docente para continuar con la investigación. La maestra había sido apartada de su cargo hace un mes y medio tras una protesta de los padres por malos tratos, pero volvió a la escuela en marzo después de una licencia por maternidad.

Los padres describen un deterioro en el bienestar emocional de los niños, quienes mostraron signos de estrés y ansiedad, como despertarse en medio de la noche preocupados por tareas escolares. "Mamá, tengo que hacer la tarea", dijo un niño, mientras que otro se mostró preocupado por el mismo motivo, revelando un ambiente de tensión en el aula.

“La mejor herramienta que tenemos los padres es darle contención, amor y la seguridad de que ellos no hicieron nada malo”, concluyó un padre.

fdj