UTA no se adhiere al paro del 30 de octubre

El secretario general de la Unión Tranviarios Automotor (UTA) en Chubut, José Pérez, anunció que la provincia no se sumará al paro de colectivos previsto para el próximo 30 de octubre. La decisión de no adherirse a la medida se debe a que el gremio está participando en un marco de conciliación obligatoria a nivel nacional, donde se negocia el tramo final de la paritaria correspondiente a este año.

"La UTA no ha anunciado ninguna medida de adhesión porque estamos en un marco de conciliación obligatoria, donde se está negociando el último tramo de la paritaria de 2024", explicó Pérez en declaraciones a FM EL CHUBUT, agregando que las negociaciones se encuentran "muy bien encaminadas" y se espera un acuerdo sin mayores inconvenientes.

El paro de colectivos fue convocado por la Confederación Argentina del Transporte (CAT), organización que agrupa a diversos gremios del transporte terrestre. Sin embargo, la UTA no participó en la reunión donde se decidió la medida de fuerza. Según detalló Pérez, las conversaciones están orientadas a un aumento del 24,7% para el último tramo del año, lo que representaría un incremento significativo para los conductores de la provincia.

A pesar del complejo escenario económico y la eliminación de subsidios al sector, el secretario general aseguró que la situación del transporte de colectivos en Chubut es estable. "Estamos pasando por un buen momento en la actividad, con sueldos al día y sin inconvenientes para percibir los incrementos acordados", indicó.

Pérez adelantó que, de concretarse el acuerdo paritario, un chofer con poca antigüedad podría alcanzar un salario inicial de 1,5 millones de pesos mensuales, mientras que los conductores con más de 10 años de experiencia llegarían a los 1,9 millones de pesos. Este acuerdo busca compensar el impacto de la inflación y asegurar la estabilidad económica de los trabajadores del sector.

Por otro lado, el dirigente sindical mencionó que uno de los temas pendientes de discusión es la regulación del transporte de larga distancia, un aspecto clave para el futuro del sector. “La posible desregulación del transporte de larga distancia trae consigo grandes desafíos, especialmente en términos de competencia con los grandes grupos económicos que dominan el mercado”, señaló. Sin embargo, aseguró que la UTA no teme estos cambios siempre que los entes reguladores cumplan con su rol de supervisión.