Trevelín: robaron un caballo y les secuestraron un cuchillo

En la localidad chubutense de Trevelín, dos hombres fueron detenidos por estar violando la cuarentena. Además, se los encontró montando un caballo, que después se comprobó que era robado. Al momento de la detención, los dos individuos intentaron resistirse al arresto, incluso portando un arma blanca.

El hecho ocurrió poco más de media hora después de la medianoche, este mismo martes. Las autoridades recibieron un aviso de dos hombres en presunto estado de ebriedad, por lo cual dos oficiales se hicieron presentes frente a la Escuela Galesa, ubicada sobre la calle Río Corintos, entre las calles Cacique Nahuelpan y Primera Junta.

Los hombres se encontraban montados sobre un caballo de pelaje oscuro. Al darle la voz de alto las autoridades, procedieron también a salir del vehículo policial y preguntarles qué hacían en ese lugar, dado que estaban violando el aislamiento social preventivo y obligatorio impuesto por el Gobierno de la Nación.

Inmediatamente, los dos individuos intentaron atropellar al personal policial con el caballo, por lo que uno de los efectivos realizó un disparo disuasivo con su escopeta, que tenía balas de goma. El caballo se asustó, y lograron evitar que atropellara a los oficiales.

Es en ese momento que el individuo que sostenía las riendas del caballo, identificado como E.A.P, de 26 años y habitante de Trevelín, intentó extraer un arma blanca. Sin esperar un segundo, uno de los oficiales realizó otro disparo disuasivo, por lo que el caballo volvió a asustarse, y arrojó a los dos transgresores al piso.

Pero la riña no terminó allí. No importó que ya no podían usar el arma blanca, que habían perdido. Ahora intentaron agredir a los agentes a golpes de puño. Sin embargo, los oficiales lograron reducir a los hombres.

Posteriormente, y después de pasar por el nosocomio local, los dos hombres fueron trasladados a la comisaría, en virtud de detenidos por delito de atentado y resistencia a la autoridad.

Quedaba la incógnita del caballo. Tras hablar con algunos vecinos, las autoridades dieron con el dueño del equino. Finalmente dieron con el dueño, que pasaba la cuarentena en un domicilio ubicado sobre la Costanera y su intersección con la calle Murray Thomas, lugar donde los hombres lo robaron.

Así, se dio conocimiento de los hechos al fiscal de turno, Dra. Julia Mateos. La misma dictó el secuestro del arma blanca, el caballo y sus riendas. Los delincuentes fueron imputados por infracción del art. 205 del código penal, por violar la cuarentena. Allí tomaron intervención la Dra. López Flamengo, del Juzgado Federal, y la Dra. Gómez, de Fiscalía Fderal.