Leila, la ex policía que fue acusada de haber engañado a un joven para que le transfiriera más de 4 millones de pesos violó la prisión domiciliaria y salió de compras en la ciudad de Santa Fe.

 Leila Ríos, de 27 años , la "estafadora de Tinder"  fue reconocida por un efectivo de la policía santafecina cuando llevaba un par de bolsas  aunque debía estar cumpliendo condena en prisión domiciliaria.

Según publicó  El Litoral, la situación fue expuesta ante el magistrado Pablo Busaniche este  jueves por la mañana en una audiencia en la que las fiscales Mariela Jiménez y Laura Urquiza pidieron la revocación del beneficio.

Ríos fue condenada a cuatro años de prisión por el delito de "usurpación" en el marco de una causa vinculada a una banda narco y, según señaló su abogado defensor, Martín Peón, ella tiene tres hijos menores de edad, por lo que se le permitía cumplir la pena en su casa.

El caso

Un joven había denunciado en Puerto Madryn a Leila por estafa. Por medio de transferencias bancarias le robó más de cuatro millones de pesos. Fue detenida en Santa Fe.

Desde el ministerio Público Fiscal de Madryn dieron a conocer que la pareja nunca se conoció personalmente, pero por medio de engaños, la mujer logró que el hombre le envíe 4,5 millones de pesos. La estafa se extendió a lo largo de tres años.

La víctima, un hombre de 25 años, declaró en su denuncia que hace alrededor de tres años “conocí a través de una página de citas a esta chica, su nombre era Leila. Comenzamos a comunicarnos por WhatsApp. Ella me comentó cosas de su vida. Me dijo que había sido abandonada por dos maridos y que tenía tres hijos que mantener. Yo en principio accedí a ayudarla enviando dinero por distintos montos, con el tiempo esto era más frecuente porque sentía que el vínculo era más cercano, más allá de ser virtual”.

“Durante estos últimos tres años, le giré alrededor de 4.500.000 de pesos”, admitió el estafado. Y agregó: “El dinero decidí enviárselo dado que ella me contaba los problemas por los que pasaba, que eran generalmente relacionados a la mantención de sus hijos, alquiler de vivienda o cuotas que tenía que pagar”.

Finalmente Leila fue detenida. Los investigadores descubrieron que la mujer es policía, empleada del Ministerio de Seguridad de Santa Fe desde 2015 hasta fines de 2021, con rango de suboficial. Además de dar su nombre real, las líneas desde donde realizó las extorsiones estaban a su nombre y de su actual pareja, por lo que no fue para los policías difícil encontrarla. Además averiguaron que se encontraba en arresto domiciliario.