"Fue en un avión", Hernán Drago y una anécdota subida de tono
El panelista de "Pampita Online" contó que hizo una apuesta con un amigo y esta terminó de manera inesperada.
Hernán Drago está más suelto que nunca y no le escapa a las anécdotas sobre su vida de soltero. Así fue como se animó a responder a Pampita si alguna vez hizo el ridículo. “¡Siii, hay mucho archivo!”, mencionó él. ¿Cuál fue alguno que te acuerdes haciendo el ridículo?”, retrucó la conductora del ciclo.
Entonces, el modelo procedió a relatar su historia: “Una vez en un avión con un amigo que veníamos jugando a las cartas y, el que perdía, tenía que hacer un papelonazo ahí. Y sí, hice un papelonazo: me tenía que levantar a una señorita del asiento tanto, decirle que me había enamorado a primera vista, y boludec** así. Fue sutil y todo, pero me tuve que mandar”,
“Imaginate que estás en el avión, re aburrida, ves que hay un hombre divino, ojos claritos, y de repente te cae esta bomba y te dice ‘Me enamoré, sos el amor de mi vida’. ¿Qué hacía la chica?”, acotó la modelo.
Pensar, son?ar, creer, crear, visualizar, proyectar... No dejes que te digan que no naciste para algo...“El que tiene un porque vivir, resiste cualquier como...”No hay que quedarse atrapado en un suen?o concretado, hay que seguir son?ando......Muy pronto #SIMPLE ..Mi fragancia (ph: @julianmer ) View this post on Instagram“El tema es que cuando yo había pasado con mi amigo, ya nosotros la habíamos visto a ella, y ella nos había visto a nosotros, y viajaba sola en el asiento de a tres. Entonces nos dijimos, ‘¿Qué apostamos? El que pierde se va a levantar a la chica del asiento 13’”, siguió relatando Hernán. “Entonces perdí yo, y me fui. ‘Perdón, me siento un poquito mareado, ¿me puedo sentar al lado tuyo? Necesito conversación, mi amigo se quedó dormido’. Y ahí nos pusimos a hablar y todo. Y es más, cruzamos los whatsapp y todo”, sostuvo el panelista.
Sin embargo, la broma no duró mucho: “Después que nos hicimos amigos entre comillas, le blanqueé que era una jodita. Ella me creyó, y solidariamente me ofreció el asiento. Pero bueno, después cuando le conté, me sentí ridículo. Pensé ‘Qué papelón, un tipo grande haciendo estas pavadas’”, reconoció Hernán Drago.