Desde hoy, Reino Unido prohíbe el uso de fracking

El Reino Unido de Gran Bretaña parece dar un brusco giro en busca de una economía verde al prohibir el fracking. El anuncio es tomado como una victoria para los grupos ecologistas locales, quienes se oponen desde hace al menos diez años a esta práctica extractiva.

La medida gubernamental es de efecto inmediato y además prohíbe a las empresas mineras la explotación de nuevos yacimientos con este método. Esto significa un duro golpe a las aspiraciones de las empresas que buscaban expandir sus fronteras de explotación.

Además, resta saber cómo afectará al mercado energético la prohibición de la práctica, si habrá suba de precios o no a nivel mundial. Pero la realidad empresarial es algo que queda en un segundo plano cuando se tiene en cuentan los informes científicos que dan cuenta del riesgo de sostener la práctica. Es que, entre los problemas que puede acarrear se encuentran los sismos.

El gobierno anunció la prohibición hasta que no haya estudios con pruebas convincentes que atestigüen que la práctica es segura.  El fracking es la fracturación hidráulica que se genera a partir de bombear químicos y arena desde abajo de la tierra hacia arriba para liberar los recursos naturales.

Desde el gobierno tory, Andrea Leadson, Secretaria de Negocios y Energía, declaró que “después de revisar el informe de la OGA sobre la actividad sísmica reciente en Preston New Road, está claro que no podemos descartar futuros impactos inaceptables en la comunidad local. Por esta razón, he concluido que deberíamos poner una moratoria en el fracking en Inglaterra con efecto inmediato”, según publica el diario The Guardian.

El mismo medio indica que Craig Bennett, director ejecutivo de Amigos de la Tierra, declaró que “esta moratoria es una tremenda victoria para las comunidades y el clima. Durante casi una década, la población local de todo el país ha librado una batalla de David y Goliat contra esta poderosa industria. Estamos orgullosos de haber sido parte de esa lucha".