Un veterano de Malvinas dejó en Puerto Madryn el único recuerdo y después de 38 años lo recuperó
Un veterano de Malvinas y el reencuentro con lo que creyó perdido en Puerto Madryn fue conmovedor , el recupero fue incréble
José Ameri , un ex combatiente de Formosa le había entregado su abrigo a una adolescente al desembarcar en Puerto Madryn. Recibió en su cuenta en una red social un mensaje, fue increíbles ver en Facebook el escrito que tanto espero e hizo que ese objeto preciado regresara a sus manos.
El formoseño y veterano de la Guerra de Malvinas después 38 años recuperará su dube, ese abrigo militar que le dio a una adolescente.
El 22 de junio de 1982 tras la batalla entre Argentina y Gran Bretaña, los combatientes desembarcaron en la ciudad de Puerto Madryn.
Los vecinos para los soldados habían formado dos cordones de personas y les dieron chocolate y pan, ese fue el día que Puerto Madryn se quedó sin pan. Los lugareños les solicitaban algún recuerdo su bien dejaban por lo general guantes y rosarios. José Ameri dejo su abrigo, el único.
José, integrante de la unidad de apoyo de combate Grupo de Artillería Monte 3 "Paso de los Libres" de Corrientes fue entrevistado por Cadena 3 y relató "El pueblo de Puerto Madryn se entera de que los veteranos regresaban de la guerra y prepararon un gran recibimiento. Como todos pedían algo, se me dio por entregar mi dube. Muchos se habían quedado con algo, aunque sea con fotos. Pero siempre hablaba con otros camaradas y con mi esposa de que mi único recuerdo lo había dejado en Puerto Madryn".
El 22 de abril de este año fue el gran día para él "Era la chica que le había entregado el capote. Ella me preguntaba si era José Luis Ameri, el de la Guerra de Malvinas. Y se me vinieron las lágrimas"
Jose AmeriQuiero aser publico el gesto de este hormbre p mi maravilloso y asta x q no un padre cuando termina la guerra en...
Posted by Jose Ameri on Tuesday, June 23, 2020Casualmente tuvo un sueño con aquel recuerdo de Puerto Madryn, Aldo, el padre de la persona que le escribió guardó el abrigo todos estos años en su placard. "Él fue el que le pidió a la hija que por favor intentara ubicar a este soldado para saber si estaba vivo. Claro, yo había dejado escrito con puño y letra mi nombre en la campera. Ella me dijo que lo guardó con mucho cariño y amor. Incluso me comentó que aún mantiene el olor a pólvora. Y ahora lo quieren devolver".
Desde ese momento Ameri y Aldo conversan a diario Desde ese momento Ameri y Aldo conversan a diario