La cumbre dejó evidencias de malestar con Torres por su cruzada con Nación
La cumbre de gobernadores patagónico dejó tela para cortar. Más allá de la bandera de unidad patagónica que quiere vender el gobernador a nivel nacional y que hasta ahora le dio resultado, la relación con algunos de ellos es tirante.
Figueroa y Werertilneck, gobernadores de Neuquén y Río Negro que comparten agenda conjunta permanente, estuvieron presentes apoyando la conformación del bloque regional pero su estilo e intereses se contraponen con la ultraexposición del gobernador de Chubut.
La cumbre de gobernadores patagónico dejó tela para cortar. Más allá de la bandera de unidad patagónica que quiere vender el gobernador a nivel nacional y que hasta ahora le dio resultado, la relación con algunos de ellos es tirante.
A Rolando Figueroa se lo notó visiblemente incómodo. Ya la relación se había tensado cuando Ignacio Torres anunció la paralización de los yacimientos si Nación no daba marcha atrás con la retención de coparticipación, con el supuesto apoyo de todos los gobernadores patagónicos. Sin embargo, “Rolo” fue el primero en advertir que de ninguna manera pararía la producción de la principal productora del país.
Amén de las presiones que pueda tener el gobernador neuquino desde los inversores de peso en Vaca Muerta, su distancia con Torres es también por una cuestión de estilo. Tal cual lo definen quienes cubren agenda diaria en Neuquén, a Figueroa –contrario a Torres- no le interesa la exposición, ni los flashes, se siente cómodo pasando desapercibido y gestionando desde las sombras.
De hecho, también confirmado por fuentes que cubren la diaria, hasta último momento desde Neuquén no confirmaban su presencia en la cumbre. “No quería ir a Puerto Madryn porque le molesta la foto y todo el ruido que está haciendo Ignacio Torres. No quiere tener ningún conflicto, su perfil político es otro”.
En Madryn, Figueroa fue el único gobernador en no tomar la palabra y solo respondió a las consultas de la prensa. “Al momento de pasar el micrófono, el neuquino decidió ceder el espacio. Rolo solamente respondió a las consultas puntuales de la prensa y remarcó que es necesario que haya seguridad jurídica para que las inversiones sigan llegando a la región y a Vaca Muerta, que concentra el 73% de la producción petrolera”, destaca un artículo de La tecla patagónica.
A Neuquén no le interesa Chubut ni ninguna otra provincia patagónica porque tiene en sus tierras el 73% de la producción petrolera del país. ¿Por qué se inmolaría Figueroa acompañando una causa del showman Torres ante un presidente tan complejo? Lo único que realmente le importa a Figueroa es estar bien con Río Negro, cuidar Vaca Muerta y las hidroeléctricas, el resto de las provincias no le interesa, por eso fue el primero en advertir que no iba a parar la producción cuando Torres amenazó a Nación.
De cara a lo que se viene, a las provincias patagónicas les conviene plantarse en grupo ante determinados embates del presidente que pueden perjudicar seriamente las potencialidades de crecimiento del interior, además de generarles problemas económicos serios. Pero eso no significa que los gobernadores apoyarán las causas particulares como la que generó Torres por Chubut. Ante un gobierno nacional impredecible, lo mejor para Figueroa es cuidar la quinta y defender el tándem Neuquén-Río Negro.